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miércoles, 20 de junio de 2018

¿Qué es diferente en el cerebro de las personas creativas?

Por Jacky

La creatividad es la capacidad de concebir nuevas ideas o conceptos que habitualmente producen soluciones originales. Esta es sinónimo de pensamiento original, imaginación constructiva o pensamiento creativo. Aunque esta es una cualidad típica del pensamiento humano, sin dudas hay personas con un mayor grado de creatividad que otras. Y ahora, de acuerdo con un reciente estudio científico, los más creativos poseen una red neuronal más fuerte y realizan hobbies más creativos.

Los psicólogos tiene un rango para ubicar la creatividad que va desde la que llaman “pequeña creatividad” (Little -C), que implica actividades como envolver un regalo o hacer una broma; hasta la “gran creatividad” (Big-C), para actividades como escribir un poema, un discurso, o crear un experimento científico.

Investigaciones de neurociencia han empezado a identificar procesos y regiones cerebrales relacionados con la creatividad. Evidencia reciente sugiere que involucra una interacción compleja entre el pensamiento reflexivo, razonado, controlado y los pensamientos más espontáneos. Por tanto, de acuerdo a los últimos hallazgos, la creatividad sería una interacción entre la posibilidad de generar una lluvia de ideas y posteriormente evaluarlas para saber cuál de ellas puede funcionar.

Pero, entonces, ¿qué lleva a que una persona sea más creativa que otra? En ese sentido, de acuerdo con el investigador del departamento de psicología de la Universidad de Harvard, Roger Beaty, su reciente estudio que indica que los más creativos son los que tienen pasatiempos más creativos. En el estudio, publicado en la revista de la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos, a 163 participantes se les aplicó una prueba común de pensamiento divergente (generar ideas creativas a través de muchas opciones), en el que se les pedía encontrar usos creativos para un mismo objeto. En este caso, mientras un participante empleó una media para cubrir sus pies, otro que pudiéramos calificar como más creativo, la usó como filtro de agua.

También se les hizo imágenes por resonancia magnética, determinando que los más creativos tenían conexiones en su red neuronal más fuertes que los menos creativos. Con este descubrimiento quizás sea posible entonces predecir el pensamiento creativo de una persona mapeando sus conexiones de la red cerebral. Las regiones involucradas en esta red “altamente creativa” forman parte de zonas cerebrales relacionadas con los sistemas de red predeterminados (pensamiento espontáneo), prominente y ejecutivo (concentración en una tarea), zonas con funciones distintas.

De acuerdo con esto, digamos que los cerebros creativos están conectados de una forma muy diferente a los cerebros que pudiéramos señalar como más “comunes”. Y es que los primeros tiene la capacidad de interactuar más fuerte con distintos sistemas cerebrales que usualmente no funcionan en conjunto.

Las personas del estudio a las que se les halló este tipo de redes cerebrales fueron principalmente músicos al improvisar una melodía, poetas al escribir unas líneas y artistas visuales cuando modelaban ideas para portadas de libros.

Sin embargo, lo que no se ha comprobado completamente es si las capacidades creativas pueden cultivarse desde la niñez o desarrollarse en la edad adulta, e incluso, si puede moldearse a través de clases en estas etapas que tengan un corte más creativo. Se desconoce por tanto, si vinculado a la creatividad hay alguna cualidad innata de cada persona que irá desarrollando con el tiempo.

Aunque, según los especialistas, se recomienda desarrollar e involucrarnos en actividades que conlleven pensar de forma distinta, innovadora y novedosa, lo que puede hacer que la red creativa empiece a encontrar nuevas maneras de responder ante determinadas tareas comunes.