Macri y el Senado encuentran un punto en común
La tensión financiera que viene afectando a la República Argentina desde hace cierto tiempo amenazó en gran medida la estabilidad de la nación. Los expertos en análisis internos también comenzaron a predecir que el país podría verse afectado por contradicciones y enfrentamientos políticos a raíz de esta tensa situación. Sin embargo, los miembros del Senado que no pertenecen al mismo partido del presidente Macri, dieron su parecer de que mantendrán sus acciones de “compromiso” respecto al ejecutivo, al menos hasta que se normalice la constante devaluación de la moneda nacional frente al dólar. Su idea es preponderar, por encima de todo, los intereses de la ciudadanía.
Los representantes del pueblo argentino, agrupados en filiaciones partidistas opositoras al partido presidencial, se reunieron con Macri y comunicaron su voluntad de contribuir a la búsqueda de alternativas para alcanzar una normalización del estado financiero nacional. Esta idea representaría una oportunidad de trabajo conjunto que pocas veces ha estado a disposición de la gestión del dignatario.
Lo cierto es que la gestión de Mauricio Macri ha estado marcada por una acentuada minoría de su partido en el máximo órgano legislativo argentino. La mayor parte de los escaños en el Congreso Nacional no forman parte de las alianzas que pudo establecer la administración al mando. Por ello, “el compromiso” establecido por miembros de otras organizaciones políticas como el Bloque Producción y Trabajo, Avanzar San Luis, Movimiento Popular Fueguino o Argentina Federal es un importante precedente de dialogo entre las partes.
Para hacer firme el respaldo a las gestiones que podría desencadenar el ejecutivo en las próximas fechas, los dirigentes y presidentes de los disimiles bloques sectoriales del senado se reunieron con el máximo mandatario del país para parlamentar. Un comunicado oficial, emitido luego del encuentro, recalcó que la labor de los distintos senadores estará encaminada a la defensa de la estabilidad financiera de todos los habitantes del país. Las acciones tomaran con pilar el sistema político democrático de Argentina y fomentará sus bases en el mantenimiento y la regeneración de fuentes de empleo, el crecimiento económico y la defensa de la producción de bienes elementales a nivel nacional.
Los legisladores también agregaron que para ejemplificar dicho respaldo a las gestiones administrativas y debido a su preocupación respecto al complejo desequilibrio económico generalizado en las últimas fechas, podrán a disposición del Gobierno sus figuras para trasmitir sensaciones de calma a la población. Los senadores afirmaron que la prioridad es dar una demostración acerca de la responsabilidad institucional de los diferentes bloques que componen el principal órgano normativo del país.
Entre los presentes en el encuentro con Macri se encontraban Luis Naidenoff, representante de Cambiemos); Ángel Rozas y Humberto Schiavoni como parte de las diferentes falanges de Unión Cívica Radical. Por su parte, Roberto Basualdo, Claudio Poggi y Myriam Boyadjian asistieron en representación de Bloque de Producción y Trabajo, Avanzar San Luis y Movimiento Popular Fueguino respectivamente. A su vez, Miguel Ángel Pichetto asistió como presidente del partido Argentina Federal y Juan Carlos Romero por Interbloque Federal. Asimismo, Guillermo Pereyra (Movimiento Popular Neuquino), Cristina Fiore (Bloque Pares), Carlos Reutemann (Bloque Santa Fe Federal), Adolfo Rodríguez Saá (Bloque Justicialista San Luis), Ada Iturrez de Capellini (Frente Cívico por Santiago), Gerardo Montenegro (Frente Popular) y Maggie Solari (Bloque Misiones) igualmente estuvieron presentes.
La reunión tuvo lugar pocas horas antes de que se iniciara el debate en la Cámara Alta de Representantes argentinos sobre un proyecto de ley que podría establecer límites a los aumentos desorbitados de tarifas en los servicios públicos que han marcado el mandato de Macri desde comienzos de 2018.
El encuentro, además, formó parte de un conjunto de diálogos que realizarán los órganos legislativo y administrativo del país suramericano para explorar la situación económica imperante. En esas reuniones, los senadores y gobernadores pondrán sobre la mesa de análisis los pros y los contras de la decisión del Gobierno de acudir al Fondo Monetario Internacional para asegurar respaldos comerciales.