Cuida y mima a tu cerebro
La alimentación es un factor definitivo para la salud, determinados alimentos pueden mejorar nuestra memoria, retrasar la aparición de enfermedades degenerativas, como el Alzheimer, o ayudar a prevenir un ictus. Conocer acerca de sus propiedades puede constituir una poderosa herramienta para seguir conservando eso recuerdos que nos hacen ser quien somos.
A la hora de preparar una receta no se suele tener en cuenta las necesidades nutricionales de nuestro cerebro: algunos alimentos pueden mejorar la memoria, nuestro estado de ánimo o incluso contribuir a retrasar la aparición de enfermedades degenerativas del sistema nervioso, como el Alzheimer. Las legumbres, por ejemplo poseen la virtud de optimar la capacidad para retener información y aportan proteínas, muy provechosas para el cerebro. Según afirma la Organización Mundial de la Salud es recomendable tomarla de dos a cuatro veces por semana como plato principal del menú. La categoría de pescado azul, que concierne a las sardinas, el salmón, el atún y la trucha, es una fuente colosal de fósforo y de ácidos grasos Omega 3, que el organismo es incapaz de producir, por lo que permiten fortalecer el cerebro, esencialmente en lo que concierne a la memoria.
Por otra parte los frutos secos, son otros de los productos que ayudan en gran medida al cerebro. Destacan por contener ácidos grasos Omega 6, imprescindible para el correcto funcionamiento de este órgano. Además los frutos secos son ricos en vitamina B6, cinc y magnesio, elementos afines con los procesos de memoria. El huevo ese alimento tan común que generalmente acompaña los desayunos, constituyen una buena fuente de vitamina B12 y colina, dos nutrientes que ayudan a conservar jóvenes las membranas celulares de todos los órganos y a prevenir enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer y la demencia senil. El tomate también es excelente para la memoria, ya que contiene una sustancia denomina licopeno, la cual posee un enorme poder antioxidante, que ejerce un efecto protector y que podría según un estudio publicado en la revista Neurology prevenir hasta un 59 % el riesgo de sufrir un ictus.
Existen muchísimos otros productos que intervienen favorablemente en la memoria y son positivos para prevenir daños relacionados con el cerebro. Se trata simplemente de prevenir con una dieta saludable, no se pierde absolutamente nada con intentarlo.
